El limes del Danubio, Patrimonio Mundial de la UNESCO

El limes del Danubio -es decir, las fortificaciones construidas a lo largo del curso del Danubio en Baviera, Austria y Eslovaquia- es la tercera sección del gran proyecto Frontiers of the Roman Empire (Fronteras del Imperio Romano), junto con los Muros de Adriano y Antonino en Gran Bretaña y el «limes de Germania Superior y de Recia» en Alemania.

El Imperio Romano ha sido uno de los imperios más importantes de la historia universal y alcanzó su máxima extensión bajo el mandato del emperador Trajano, a principios del siglo II después de Cristo. Incluye una superficie de más de 6,2 millones de km² y sus más de 7500 km de frontera estaban marcados por cursos de ríos, fronteras terrestres con barreras construidas artificialmente, cordilleras y zonas desérticas.

Incluido dentro de un proyecto llamado Frontiers of the Roman Empire (Fronteras del Imperio Romano), la totalidad de su trazado queda ahora bajo la protección de la comunidad internacional como Patrimonio mundial de la UNESCO.

El limes marcó durante siglos la frontera entre el Imperio Romano y los territorios bárbaros de Germania que los romanos nunca llegaron a conquistar, e iba desde el Mar del Norte hasta el Mar Negro. El Danubio era la frontera septentrional natural del Imperio Romano en la zona de Baviera, Austria, Eslovaquia, Hungría y más adelante en el propio curso del río. A pesar de la barrera natural que creaba el propio trazado del río, las fronteras además estaban muy protegidas militarmente para asegurar los límites del Imperio, pero también para garantizar la regulación del intercambio de bienes.

La seguridad de la sección austriaca del limes del Danubio, con una longitud de 360 kilómetros, estaba garantizada por 4 campamentos de legionarios, 14 campamentos de tropas auxiliares y 20 torres de vigilancia (burgi) conocidas hasta el momento. Sin embargo, el número real de torres de vigilancia era seguramente mucho mayor. Los campamentos de legionarios más famosos en la sección austriaca eran Lauriacum (Enns), Vindobona (Viena) y Carnuntum. En el caso de que las tropas germánicas llegasen a cruzar la frontera de forma incontrolada, una cadena ininterrumpida de señales entre las torres de vigilancia y los campamentos permitía al ejército romano reaccionar con suma rapidez.

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Carnuntum - La metrópolis junto al limes del Danubio

Carnuntum tenía una posición privilegiada lo largo del limes del Danubio. Bajo la protección de un campamento de legionarios y otro de tropas auxiliares, la capital de la provincia romana de la Alta Panonia -como lugar de residencia del gobernador- se convirtió en una ciudad cosmopolita con aproximadamente 50 000 habitantes y una superficie de 10 km2. A su vez, era la única ciudad de su tamaño e importancia que se encontraba directamente en la frontera, en la intersección de la Ruta del ámbar, como una de las conexiones norte-sur más importantes, y la Ruta de los limes, como una de las conexiones oeste-este más importantes del Imperium Romanum.

El comercio y las transferencias culturales impulsaron el florecimiento de la cultura y la prosperidad. Se importaba aceite de oliva, vino, salsa de pescado como condimento, y también dátiles e higos del área mediterránea; pero también se traían maravillosas vajillas de Italia o la Galia. Todavía hoy podemos ser testigos del alto nivel de vida del que se disfrutaba en la antigua Carnuntum gracias a innumerables piezas de joyería, esculturas o fragmentos de exquisitos frescos.

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